En éste acogedor fogón
nos reunimos en un gran salón,
de tertulia nos componemos
hablamos de temas sociales
pasados y otros actuales.
David nos saludas muy cordial
nosotros respondemos igual,
por ser asiduos de éste Fogón
degustamos las viandas más finas
exquisiteces de la cocina.
Pedimos para tomar café
y alguno más refinado
se toma un descafeinado,
Fernando no toma pastilla
pero si cata manzanilla.
Migue que tiene buena mano
mejora la de Arguiñano,
trabaja bien el cuchillo,
la parrilla y la cazuela
aprendido de su abuela.
Todo servido por Susana
empleada joven y ufana,
por simpática, su buen hacer,
y de gran profesionalidad
nos tratamos con fraternidad.
David dirige con habilidad
su labor de responsabilidad,
siempre pendiente que nada falte,
que el cliente quede satisfecho
y todo ésto se da por hecho.
La tertulia A. Garcia Cano
éste acoguimiento sano
y cordial que se nos ofrece
lo agradece de corazón
a los proletarios del fogón.
Jorge. A. Escudero Orta
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